En Clínica Merced, ofrecemos tratamientos modernos y efectivos para las várices. A continuación, describimos las opciones disponibles que pueden ayudar a mejorar la apariencia de las venas y aliviar los síntomas.

1. Escleroterapia

La escleroterapia es una de las técnicas más comunes para tratar várices pequeñas y de tamaño mediano. Este procedimiento consiste en inyectar una solución especial en la vena afectada, lo que hace que la vena se cierre y finalmente se desvanezca con el tiempo.

• Ventajas: Es un procedimiento ambulatorio, mínimamente invasivo y no requiere anestesia.
• Resultados: Los resultados suelen ser visibles después de varias semanas, y se puede realizar más de una sesión para obtener mejores resultados.

2. Terapia Láser Endovenoso (EVLT)

El tratamiento láser endovenoso (EVLT, por sus siglas en inglés) es una opción moderna y altamente efectiva para várices de tamaño mediano a grande. Se realiza guiando un láser a través de una pequeña incisión en la piel hasta la vena afectada, lo cual genera un calor que sella la vena.

• Ventajas: Es una opción mínimamente invasiva y suele tener un tiempo de recuperación rápido. Los pacientes generalmente pueden retomar sus actividades normales en un par de días.
• Resultados: Los efectos son visibles de inmediato, y la vena tratada se reduce con el tiempo hasta desaparecer.

3. Ablación con Radiofrecuencia

La ablación por radiofrecuencia es un tratamiento en el que se introduce un pequeño catéter en la vena para calentarla mediante energía de radiofrecuencia. Este calor colapsa la vena, que es absorbida luego por el cuerpo.

• Ventajas: Este método es rápido y casi indoloro, además de requerir poco tiempo de recuperación.
• Resultados: Los pacientes suelen ver mejoras significativas en las semanas siguientes al procedimiento, con una reducción notable en el dolor y el aspecto de las várices.

4. Microflebectomía

La microflebectomía es una técnica quirúrgica ambulatoria en la que se realizan pequeñas incisiones en la piel para extraer las venas varicosas. Esta técnica es útil para várices más grandes y visibles.

• Ventajas: Permite eliminar físicamente las várices de gran tamaño con precisión.
• Resultados: Aunque es una intervención quirúrgica, las cicatrices son mínimas, y el resultado estético es excelente. El tiempo de recuperación puede variar, pero en general, los pacientes vuelven a su rutina en pocos días.