drenaje linfático

Drenaje Linfático

DRENAJE LINFÁTICO

El drenaje linfático es una técnica de masaje que se enfoca al sistema linfático superficial y que ayuda a la eliminación del líquido intersticial (exceso de líquido) y a activar o reforzar el sistema inmunológico. Christian Oyaneder.

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La linfa es un líquido blanco lechoso que depura los tejidos orgánicos, se interrelaciona con nuestras células por la filtración de plasma que se produce en los capilares sanguíneos. Los canales linfáticos van paralelos a las venas y arterias de nuestro cuerpo, entrando y saliendo, purificando la sangre y llevando las toxinas a los ganglios.

¿Qué es el sistema circulatorio linfático?

El sistema circulatorio linfático es, principalmente, un sistema de drenaje de líquidos, cuyos efectos son determinantes para mantener la salud de los tejidos. Cualquier anomalía o irregularidad orgánica que interfiera directa o indirectamente sobre la circulación linfática, dificulta el drenaje de los líquidos intersticiales, lo que afecta a las funciones del sistema linfático. Este hecho obstaculiza los procesos de nutrición y depuración de las zonas afectadas, al mismo tiempo que se debilitan las defensas del organismo. De ahí que muchas personas recurran a la técnica de drenaje linfático para que el líquido intersticial se elimine y se refuerce el sistema inmunológico.

¿Cuáles son los principios básicos de la técnica del drenaje linfático?

Los tres principios básicos para que el éxito de esta técnica son la presión, el ritmo y la dirección. La presión debe ser controlada de forma continua masajeando sólo la superficie cutánea sin tocar la musculatura; como si de un suave oleaje se tratara. El ritmo debe sintonizarse con una respiración tranquila y pausada y, lo más importante, la dirección, debe adecuarse a cómo fluye la linfa para ayudarla a seguir su recorrido por su cauce natural.

¿Qué efectos aporta la técnica de drenaje linfático?

La técnica de drenaje linfático es una práctica muy demandada dentro de la gama de masajes terapéuticos gracias a la gran multitud de efectos que aporta:

  • Estimula la circulación linfática.
  • Aumenta la producción de linfocitos en los ganglios.
  • Favorece la regeneración de los tejidos.
  • Actúa sobre el sistema nervioso: es relajante.
  • A la desintoxicación.
  • Acelera la cicatrización y recuperación.
  • No aumenta la temperatura.
  • A la piel a verse más clara y luminosa.
  • Absorber edemas.

¿Cuáles son las principales aplicaciones de la técnica del drenaje linfático?

Se puede aplicar en numerosos casos: en infecciones de todo tipo, pre y post operatorio de cualquier operación, dolor de cabeza, estrés, insomnio, reducción de peso, estreñimiento, artritis, artrosis, ciática, lumbalgia, parálisis, diabetes… hasta para iluminar el rostro.

Ahora bien, las principales aplicaciones del drenaje linfático serían las siguientes:

  • Un linfedema es una obstrucción en los vasos linfáticos que afecta a la circulación linfática y se origina un hinchazón debido al acumulo de linfa. ¿Por qué pueden obstruirse los vasos linfáticos? Por traumatismos, tumores, inflamaciones, roturas de fibras musculares, cicatrices e intervenciones quirúrgicas. La técnica de drenaje linfático es el principal método para contribuir a drenar la linfa acumulada de forma rápida.

  • Reducción de la celulitis.

La celulitis (o lipedemas), son acúmulos de grasa localizados principalmente en las piernas, las caderas y los glúteos. Los lipedemas comprimen los vasos linfáticos dificultando la circulación de la linfa y aumenta la fragilidad de los capilares sanguíneos, pudiéndose presentar en algunas ocasiones hematomas o moretones sólo al presionar. El drenaje linfático es uno de los tratamientos más indicados para combatir la celulitis.

  • Contra la retención de líquidos.

Funciona igual tanto en hombres como mujeres, pero es más demandado por mujeres debido a la gran cantidad de cambios hormonales que sufren diariamente, ya sea por la menstruación, el embarazo o la menopausia. En este caso, el tratamiento de drenaje linfático favorece el flujo de la linfa reduciendo la hinchazón típica en las piernas.

  • Favorece pieles con acné.

El acné es el resultado de una actividad superior de las glándulas sebáceas, lo que acumula la grasa en el interior de éstas y así se producen los típicos puntos blancos. Estas grasas que se acumulan presentan un cultivo de bacterias que irritan la piel y causan trastornos cutáneos. El efecto drenante y purificador del drenaje linfático contribuye a eliminar las toxinas, influyendo directamente sobre la piel afectada que responde de forma favorable al tratamiento.

  • Técnica anti-estrés.

La utilización del drenaje linfático favorece la relajación y la eliminación del estrés. ¿Por qué? La técnica manual que se aplica se caracteriza por la lentitud, suavidad y monotonía de la manipulación sobre la piel, lo que induce a la relajación e incluso al sueño. Sobre todo cuando se aplica en el rostro, cabeza y nuca.

¿Cuáles son las contraindicaciones de la técnica de drenaje linfático?

Hay que tener en cuenta que hay complicaciones crónicas en las que no se puede aplicar un drenaje linfático por las características mismas de la enfermedad. Algunas de ellas sería la insuficiencia renal o cardíaca, cáncer, hipertensión, flebitis, trombosis, edema por insuficiencia cardíaca o enfermedades de la piel.

Conoce todos los tipos de drenaje linfático que te puedes realizar:

Es importante saber que una de las principales funciones de la linfa es activar el sistema inmunitario. El sistema linfático no posee un sistema de bombeo automático, como el del sistema circulatorio, por eso es tan importante que se mantenga activo, además de que es el encargado de promover la desintoxicación del cuerpo. Es por eso que cuando realizamos el drenaje linfático manual conseguimos que nuestro cuerpo elimine los líquidos acumulados y el exceso de toxinas.

Es muy importante que este tratamiento sea realizado por profesionales. Es uno de los procedimientos más demandados en centros de estética por sus excelentes resultados físicos y para la salud.

Drenaje linfático facial.

Este tratamiento consiste en realizar masajes emitiendo presión con el objetivo de que la carga linfática se procese y sea eliminada correctamente. El drenaje linfático facial puede servir para trabajar varias afecciones, como puede ser la rosácea, que causa congestión, enrojecimiento e inflación de la piel; o también acné ya que reduce la proliferación de bacterias.

Abdomen.

El objetivo principal del drenaje linfático de abdomen, es eliminar los líquidos que contienen toxinas para estimular y activar la circulación, de esta forma se reduce la hinchazón y una gran parte de las grasas que obstruyen la circulación son expulsadas a través de la orina. Este tratamiento no es recomendable en mujeres embarazadas. El tipo de drenaje que si se pueden realizar es el que es aplicado en las piernas.

Piernas.

El drenaje linfático de piernas trabaja la acumulación de linfa en los tejidos que provocan pesadez y también hinchazón. Es por eso que después de realizarse este tratamiento, el paciente puede sentir las piernas más livianas y estilizadas.

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